#Smishing
Aprende a protegerte
La sobreinformación provocada por la enorme cantidad de noticias, comunicados y contenidos que recibimos a diario, junto con la sofisticación actual tanto de los SMS (smishing) como de las llamadas telefónicas (vishing) o correos electrónicos (phishing), hace que sea mucho más complicado determinar aquellos que son fraudulentos de los que no lo son.
APRENDE A PROTEGERTE
Sé precavido
Desconfía de los emails/SMS que recibas cuyo remitente indique que es Ruralvía o algún servicio conocido y te solicite algún tipo de información personal. Tu Entidad nunca te redirigirá a una página web para que inicies sesión ni te solicitará por esta vía que proporciones tus credenciales de usuario o el PIN de tu tarjeta.
Sospecha
Si el mensaje es alarmista o sospechoso y te obliga a tomar una decisión de manera inminente, es mala señal. Nunca te comunicarán la inactividad de tu cuenta o un posible bloqueo de tu tarjeta mediante estos canales. Simplemente, no contestes y ponte en contacto directamente con tu Entidad.
Analiza cómo se dirigen a ti
Este tipo de correos y SMS normalmente se hacen mediante envíos masivos, por lo que no suelen utilizar tu nombre, no son personalizados en cuanto al contenido y podrían contener errores gramaticales en la redacción. Fórmulas genéricas como "Estimado señor o señora" indican que probablemente estés ante una estafa.
Comprueba la legitimidad de las direcciones de correo electrónico
Fíjate minuciosamente en todo lo que contienen y analiza el dominio (lo que va a continuación del “@”), búscalo en internet, etc. Si recibes la comunicación desde un buzón de correo tipo @gmail.com, @outlook.com o cualquier otro similar, sospecha, ya que un servicio con cierto prestigio utilizará sus propios dominios para las direcciones de email corporativas.
Comprueba la legitimidad de los enlaces y servicios incluidos en el correo
Para inspeccionar un enlace, pasa el ratón por encima de la URL y aparecerá un recuadro que mostrará el sitio al cual se dirige. Revisa si coincide el texto de dicho enlace con la dirección a la que apunta. Si un enlace parece extraño, elimina el correo. Nunca hagas clic.
Conexión Segura
Por último, accede a la página web de tu Entidad asegurándote de que la URL empieza por HTTPS en lugar de HTTP. Busca siempre el candado que te garantiza una conexión segura.